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Vitamina G: Pies descalzos

Alguna vez te preguntaste que pasaría si no usáramos zapatos? Si viviésemos “conectados” realmente con la tierra? Que cambiaría?

Muy poco conocido es el concepto de Grounded/Earthing o Vitamina G; pero se establece que sería el eslabón perdido en la ecuación de la salud humana.

Este concepto hace referencia a los beneficios que traeríamos a nuestra salud con el simple hecho de caminar descalzos. La llamada “Vitamina G”  viene de la tierra, si, como lo lees, directamente de la tierra. (Parece una locura, pero se asemeja a la forma en que obtenemos la Vitamina D; del sol). En China la energía de la naturaleza le llaman Qi, en India Prana y en la ciencia occidental recientemente se explica mediante Earthing/grounding.

 

El cuerpo humano es conductivo, compuesto en gran parte por agua y minerales. Pero nos hemos desconectado, aislado mediante zapatos, superficies, concreto, edificios y todo aquello parece más “civilizado”, que no podría estar más lejos del origen del equilibrio eléctrico que necesita el cuerpo humano.

 

Esta “Vitamina” es recibida por nuestro organismo cuando nos ponemos en contacto directo (sin zapatos) con la superficie de la tierra, en donde recibimos electrones libres que disponible la superficie de la tierra para intercambiar con su medio. Estos electrones libres que recibimos de la tierra son aquellas moléculas que van a neutralizar nuestros Radicales libres, los cuales son causantes de gran parte de la INFLAMACIÓN y del ENVEJECIMIENTO CELULAR.

Es importante recordar que hoy en día se conoce que la inflamación es la base de todas las enfermedades crónicas no transmisibles (Diabetes, Hipertensión, Dislipidemias, Cancer, etc). Te imaginas como algo tan simple podría cambiar tan drásticamente nuestra salud? (Algunos lo describe como el santo grial de la inflamación.)

 

Múltiples estudios confirman que esta ciencia del grounding  tiene muchísimas implicancias en la salud con pocos minutos de conexión al día, tales como:

  • Regulación de los niveles de cortisol y perfil circadiano (hormona del estrés)
  • Regulación del ciclo de la melatonina (hormona del sueño)
  • Reducción de Triglicéridos, glicemia, fosfatasa alcalina y PCR (indicador de inflamación subclínica)
  • Aumento y regulación del metabolismo y disminución del catabolismo proteico (variación del peso evidenciada)
  • Recuperación más efectiva y rápida en deportistas (mejor procesamiento del ácido láctico).
  • Mejora del sistema inmune (aumento de la concentración de gama globulinas)
  • Disminución del dolor/inflamación en patologías como artritis
  • Potente antioxidante y protector cerebral (contra enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer, Parkinson, ELA, entre otras).
  • Protección del ADN, evitando modificaciones genéticas por el ambiente externo, permitiendo una evolución más benéfica de los genes.

Y tú? Que esperas para recuperar tu conexión con la tierra?

 

Mi mejor recomendación para recibir esta bomba de energía sería lo que llamo THE POWER WALKING: Vitamina G (descalzo)+ Vitamina D (sol) + ejercicio!

 

 

Por Teresita Gormaz – Nutricionista