Homeostasis

Buscar el equilibrio en la salud no es algo que se relacione sólo a nuestros hábitos diarios, sino también es algo sucede de manera natural en nuestra fisiología. Nuestro cuerpo es realmente un fenómeno maravilloso.

Existe un término llamado homeostasis, donde el organismo recurre a varios mecanismos de autorregulación para corregir alteraciones que puedan provocar un desequilibrio. Esto sucede a nivel de metabolismo, reproducción, crecimiento, diferenciación celular, movimiento y respuesta a cambios internos y externos (1). La interacción de estos sistemas con factores externos e internos es lo que mantendrá (o no) el equilibrio en nuestro cuerpo para mantener una salud óptima, sin embargo, la interrupción de este equilibrio puede ocurrir por diferentes causas.

Una de ellas es la caracterización de nuestros hábitos alimenticios. La nutrición influye enormemente en la capacidad de autorregulación que tiene nuestro organismo. Al alimentarnos de manera natural y nutritiva prevenimos enfermedades como la hipertensión, la diabetes, la osteoporosis, el cáncer y hasta el alzhéimer. También, al tener un sistema digestivo íntimamente conectado con nuestro sistema nervioso, una correcta nutrición puede determinar mis estados de ánimo y salud mental (2), factor que también es importante e influye en la homeostasis.

Nuestra fisiología nunca abandona el equilibrio. Nuestros hábitos debieran imitar esta tendencia. Así, nuestra salud estará en condiciones favorables.

(1) González-Jiménez, E., & Schmidt Río-Valle, J.. (2012). Regulación de la ingesta alimentaria y del balance energético: factores y mecanismos implicados. Nutrición Hospitalaria, 27(6), 1850-1859. https://dx.doi.org/10.3305/nh.2012.27.6.6099
(2) Hernando-Requejo, Virgilio. (2016). Nutrición y deterioro cognitivo. Nutrición Hospitalaria, 33(Supl. 4), 49-52. https://dx.doi.org/10.20960/nh.346